Recordamos hoy el 204 aniversario de la Declaración de la Independencia nacional. La voluntad de los congresales reunidos en Tucumán, provenientes de distintos y más o menos distantes territorios de las entonces Provincias Unidas del Río de la Plata, fue manifestada el unísono. La determinación resonó con fuerza y energía aquel 9 de julio de 1816, desde una de las salas de la casona cedida para la ocasión por Doña Francisca Bazán de Laguna.
Antes de ese día y hasta hoy, sostener la independencia demandó y requiere de lucha, de una labor con compromiso, entrega y tesón por parte de todos los habitantes de esta tierra. Entonces, como hoy, al celebrar la independencia se conjugan distintas tonadas, se funde un crisol de vivencias, una paleta de colores de suelos. La historia y el presente reclaman trabajo en común, solidaridad y encuentro para que el presente y el porvenir sean en el más acabo sentido de la expresión, una celebración de independencia. De la acción de cada uno de nosotros, en un nosotros compacto, en un “todos somos argentinos”, depende sostener la independencia con justicia y paz.
Desde la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza, junto a los 41 Sindicatos de Luz y Fuerza del país, bregamos por esa independencia fuerte que hunda sus raíces en la solidaridad y la inclusión.